La ceremonia marca un hito en el Programa de Fortalecimiento de Medios de Vida que la Corporación desarrolla junto a ACNUR en el territorio.
Puente Alto, 19 de diciembre de 2025.– Con la participación de equipos técnicos, organizaciones colaboradoras y representantes de la comunidad, la Corporación Dolores Sopeña realizó la ceremonia de certificación de 102 participantes del Programa de Fortalecimiento de Medios de Vida del Campamento Millantú, en su línea de Certificación de Oficios Laborales, iniciativa financiada por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
El programa, ejecutado por la Corporación Dolores Sopeña a través de su OTEC Sopeña, forma parte de un proyecto de trabajo comunitario que se desarrolla en el campamento Millantú, en la comuna de Puente Alto, y que busca generar impactos concretos y sostenibles en la vida de personas, promoviendo su autonomía económica y fortaleciendo sus trayectorias formativo-laborales.
Durante la ceremonia, la directora de la Corporación Dolores Sopeña, Gabriela Herrera Reyes, destacó la proyección del programa en la comunidad: “Creemos que el impacto que tendrá en el territorio será muy beneficioso para ellos y sus familias y para el desarrollo comunitario del Campamento Millantú”.
Los procesos de capacitación contemplaron formación en nivelación de estudios con fines laborales, español básico para el trabajo, gastronomía, infoalfabetización y talleres de oficios, respondiendo a necesidades identificadas junto a actores territoriales y a la comunidad.
Por su parte, la jefa de la Oficina Nacional de ACNUR Chile, Rebeca Cenalmor-Rejas, subrayó el sentido de la certificación como una herramienta para la generación de oportunidades y la inclusión sociolaboral: “Este certificado queremos que no sea solo un documento, sino que se convierta en una puerta a nuevas oportunidades y que sea también un recordatorio de que el talento y la perseverancia siempre encuentren caminos para crecer”.
Desde la experiencia de las y los participantes, Janet Briceño Reyes, certificada en el plan formativo de gastronomía, valoró el proceso: “Creo que me va a abrir puertas de trabajo, y creo que en el futuro puedo tener una oportunidad de trabajo en este rubro. Puedo desarrollarme como mujer, como persona y me siento feliz”.
La actividad se enmarca en el trabajo colaborativo que la Corporación Dolores Sopeña y ACNUR realizan, orientado a la protección, formación y fortalecimiento de medios de vida de personas migrantes, refugiadas, solicitantes de asilo y población nacional.
La ceremonia finalizó con la entrega de diplomas a las y los participantes, seguido de un espacio de encuentro comunitario junto a equipos, docentes y organizaciones colaboradoras.
